lunes, 25 de febrero de 2013

La casa de la familia Escandón


-- Casa de los Leones y/o Perros —





Arriba, en una imagen fechada en 1917, aparece la “Plazuela de Guardiola” con la casa de la familia Escandón y un fragmento de la casa Del Valle sobre la calle de Plateros. Destruida en 1938, también fue conocida como Club de Banqueros, Casa de los Leones o Casa de los Perros y fue edificada en el sitio donde también estuvo la residencia de los Marqueses de Santa Fe de Guardiola; hoy, ahí se encuentra el Anexo Guardiola del Banco de México. Abajo, en una litografía firmada por A. Gallice que aparece en ALBUM MEXICANO (Lito.Debray Sucs. Portal del Coliseo Viejo 1879), la “Plazuela de Guardiola” con la casa de los Condes del Valle de Orizaba y a la izquierda, la casa de la Familia Escandón.



Abajo, en una imagen fechada en 1866, aparece a la izquierda la residencia de los Marqueses de Santa Fe de Guardiola y al fondo la casa de los Condes del Valle de Orizaba, mejor conocida como la casa de los Azulejos (probablemente remodelada en 1737 por maestro Diego Durán); al centro en la que se conocía como Plazuela de Guardiola –y que conserva ese nombre hasta nuestros días— la escultura que Maximiliano I de México obsequiara en Septiembre de 1864 a la ciudad de México, para honrar a Morelos, ejecutada por Antonio Piatti. La Casa Guardiola sería destruida en 1870 para dar lugar a la residencia que el arquitecto Rodríguez Arangoity proyectó para don Vicente Escandón, su esposa Guadalupe Arango y los hijos del matrimonio.



Abajo, en una fotografía familiar de 1889, aparecen en la Hacienda de La Condesa –de la entonces lejana Tacubaya-, Guillermo de Landa y Lozano abrazado por Dolores de Escandón y Arango (cuarta hija de don Vicente y que casaría con José María Rubín), María, José y Guadalupe de Landa y Lozano. Atrás, don Manuel Escandón y Arango (hijo mayor de don Vicente y que heredaría la casa de la plazuela de Guardiola), José Wenceslao de Landa y Escandón cargando a Jorge de Landa y Lozano; además, sentada y vestida de negro, aparece doña María Guadalupe Arango Escandón –esposa de Vicente Escandón y propietaria original de la casa- entre otros.



Don José Fernando Vicente Escandón Garmendia nació en la ciudad de Puebla, México, el año de 1814; hijo de Pablo Escandón Cavandi (1770-1824) y de María Guadalupe Garmendia Mosquera (1779-1833), casó en julio 1855 con su sobrina (2°) María Guadalupe Arango Escandón (1825-1912) hija de Alejandro María Manuel Arango Menéndez (1789-1875) y María Guadalupe Escandón Garmendia (1801-) con quien procreó seis hijos. Sus intereses se encontraban en campos muy diversos como la banca y la electricidad, la comercialización de productos agrícolas y el aumento del valor de la tierra cercana a la ciudad; un ejemplo puede darse en los terrenos de “La piedad” donde fraccionó y comercializó un panteón que hoy conocemos como “Francés” y otro ejemplo podemos encontrarlo en la “La Condesa”: En 1873 el señor Escandón compró la hacienda de Santa Catarina del Arenal, y como último propietario de la finca repartió entre sus herederos la casa y los terrenos correspondientes; la casa pasó a Dolores Escandón y Arango de Rubín (que donó en 1911 como regalo de boda a su hija Dolores Rubín Escandón y su yerno Jorge Gómez de Parada).
Como referencia, podemos también señalar que nuestro Vicente Escandón fue hermano de Antonio Escandón Garmendia (1824-1877) ligado a la construcción del ferrocarril de Veracruz y que en 1864 formó parte de la “Comisión de Miramar” que ofreció a Maximiliano de Habsburgo el trono de México. Abajo, en una magnífica imagen fechada en 1901, aparece la casa de la familia Escandón frente a la plazuela de Guardiola.



En 1859, Vicente Escandón recibió como parte de su herencia el terreno de cerca de 1000m² que ocupaba la quebrantada residencia de los Marqueses de Santa Fe de Guardiola y en 1869 pidió al arquitecto Ramón Rodrígez Arangoity (1831 –1882) un proyecto para la nueva residencia familiar; el prestigiado arquitecto luego de destacar en la Academia de San Carlos y como estudiante y profesional en Roma y París, había servido a Maximiliano como ingeniero director de la Casa Imperial . Su arquitectura de sello Neoclásico ha sido destruida o alterada, aunque alguna de sus obras sobreviven en la ciudad de México y el resto de la República; es recordado por ser ganador con Vicente Heredia del proyecto (1863) para el monumento a la Independencia de México en la Plaza de Armas (antecedente de nuestra Columna en Reforma), así como por sus intervenciones en el Palacio Imperial (hoy Nacional) como “director de las obras de Palacio”. En Paseo de la Reforma, pervive el diseño de su monumento dedicado a Cristobal Colón, encargado en 1871 por don Antonio Escandón, aunque ejecutado por Carlos Cordier.


La casa ocuparía un amplio predio con frente de 38 metros hacia el sur lindando con la plazuela adyacente a la 1° Calle de san Francisco (hoy Madero), treinta metros frente a la Calle de santa Isabel (hoy Eje Central) hacia el poniente y el Callejón de la Condesa hacia el oriente; hacia el norte, el predio lindaba en dos propiedades con frente a lo que sería la ampliación de la Avenida Cinco de Mayo que se abrió en 1900, luego de la demolición del Teatro de Santa Anna. Abajo, un fragmento del plano de la SANBORN MAP CO. Titulado “Insurance map of the City of Mexico, Federal District” fechado en 1905, en que aparece marcado el predio que ocupaba la casa de la familia Escandón.



Y dice la historia: "... levantado a las expensas de Don Vicente Escandón, en el año de 1871, quien encargo al arquitecto Rodríguez Arangoiti (sic.) los proyectos para el levantamiento de la casa en cuestión, y bien por no haberle satisfecho del todo esos proyectos, o bien por no inspirarle Rodríguez -como constructor- toda la confianza necesaria, o por ambas cosas a la vez, confióle la dirección de la obra al señor Hidalga quien dirigió la construcción, acaso introduciendo acertadas variantes en lo primeramente ideado por Rodríguez. Texto extraído de "La Casa de los Escandón" por Lauro E. Rosell. (1938)



Sabemos que la edificación de la casa se llevó a cabo durante el último año de vida del arquitecto Lorenzo de la Hidalga (1810-1872), recordado por diseñar y reconstruir la Cúpula de Santa Teresa la Antigua, así como el Gran Teatro Nacional (Teatro Santa Anna) y ser director de las obras del Palacio Imperial en tiempo de Maximiliano I. Arriba, la fachada del Teatro en una pintura de Pedro Gualdi fechado en 1852, que sería destruido para ampliar el trazo de la avenida Cinco de Mayo y que permite entender la aseveración de Rosell relativa a la introducción de “acertadas variantes”.

Se puede revisar una nota acerca de la villa campestre que erigiera don Lorenzo De la Hidalga, e inaugurara hacia 1860 en lo que hoy conocemos como Avenida Puente de Alvarado en: (ver) https://grandescasasdemexico.blogspot.mx/2016/05/villa-del-arquitecto-de-la-hidalga-en.html



Arriba, un plano publicado por el arquitecto Israel Katzman en “Arquitectura del Siglo XIX en México” (UNAM-1973) que al pié dice: “Proyecto de casa en la plazuela de Guardiola, Arquitecto Lorenzo Hidalga. México D.F., hacia 1867”; es interesante notar que en algún momento, el proyecto contempló una edificación de tres niveles. Abajo -como elemento comparativo-, una imagen de la casa que para sí edificó hacia 1858 el arquitecto De la Hidalga en la 1° Calle del Indio Triste (para más datos, ver); no asombra el notar similitudes entre los elementos de diseño, aunque llama la atención que la herrería que finalmente se colocó al inmueble, resultó de diseño muy parecido…



El edificio de planta rectangular, dos niveles y patio central saturaba totalmente el terreno, se edificó durante 1870 y 71 creando un soportal de acceso con tres arcos hacia el sur, manteniendo y aprovechando la plaza jardinada hacia la calle de San Francisco; en la Planta Noble ese vestíbulo se coronaba con una galería/mirador de ocho columnas flanqueado simétricamente por remates con “paladianas” hacia el sur y tribunas acristaladas hacia oriente y poniente.



Dice José Manuel Villalpando que: “En 1871 don Vicente Escandón, nuevo dueño de la casa del marqués de Guardiola, mandó convertirla en un palacio moderno: pórtico de tres arcos, terraza; balaustradas en el remate junto con esculturas de perros y leones; vistosas celosías de sus balcones procedentes de Sevilla y Córdoba, y un hermoso jardín tipo inglés al frente complementaban su nueva imagen.” Al interior, el patio con tres arcos por lado (en coincidencia con el soportal de acceso) sostenía amplios pasillos de la “planta noble” que con dobles fustes, esta en deuda formal con el Palacio de Minería. Abajo, una imagen del patio de la casa Escandón/Arango.



A la derecha del patio (curiosamente no rematando el eje principal), se daba acceso a una vasta escalera –muy a la manera colonial—y que también está en deuda con Manuel Tolsá por el uso de una lucera sobre el entre eje de remate; la peculiar posición de la escalera, permitía acceso a la casa desde el Callejón de la Condesa y entrada a las secciones de servicio alineadas a lo largo de la colindancia norte. Abajo, la escalera de la casa en una imagen de 1907.



Para tener una idea de los espacios interiores, aparecen abajo dos fotografías del “Salón de recibir” fechadas en 1914. El extenso espacio que abría hacia el balcón sur y debía su amplitud al ingenioso uso de dobles columnas para ampliar el claro librado, sirvió también por años como salón principal del club de banqueros.





Como complemento, aparece abajo una fotografía del comedor, en el ala poniente de la casa; además de los retratos familiares firmados por Cordero, domina la composición el lienzo pintado en 1865 por Tiburcio Sánchez de la Barquera: “Retrato de la familia Escandón Arango en Tacubaya”, donde como complemento a las imágenes de los cuatro hijos mayores del matrimonio de don Vicente Escandón Garmendia y María Guadalupe Arango , Sánchez de la Barquera agregó la “Villa Romana de Tacubaya” (Ver).


En la imagen aparecen de Izquierda a derecha María Guadalupe Escandón Arango (1856-1902), María Dolores Escandón Arango (1862-1932), Alejandro Escandón Arango (1858-1910) y Manuel Escandón Arango (1860-1908) que en 1886 casaría con Guadalupe Escandón Barron. Después nacerían María Dolores (1862-1932), María de la Luz (1866-1881) y Vicente (1871-1903), por lo que no aparecen en el retrato...




Es interesante hacer énfasis en que la casa se edificó en 1871, incluso antes de iniciado el porfiriato (1876-1911) y cuando muchos de los cambios que damos por un hecho en la ciudad, aún no sucedían. El mejor ejemplo que puedo dar, es la transformación sufrida a lo largo de la calle que al oniente de la casa recíbía el nombre de Santa Isabel y luego de Plateros pasaba a estar dedicada a San Juan. Abajo, en una poco común fotografía captada sobre la Calle de Santa Isabel (luego San Juan de Letrán y hoy Eje Central) mirando hacia el norte, pueden verse a la izquierda el Templo de Santa Isabel (ya convertido en “Fabrica de sedas y tintorería luego de la Reforma) –en el sitio que luego ocuparía el Palacio de Bellas Artes-- y a la derecha un fragmento de la fachada poniente de la Casa Escandón-Arango en el año de 1892. Más abajo, una toma del mismo sitio veinte años después -aunque con un ángulo más amplio-, donde ya se edifica el Teatro Nacional (Palacio de Bellas Artes) en el sitio que ocupaba el templo de santa Isabel, además, a la derecha puede verse con mayor amplitud la casa Escandón y detrás de ella el edificio de la “Mutual Life Insurance” que se edificó sobre Cinco de Mayo y ahora es la sede histórica del Banco de México…




Abajo, otra toma de esa esquina, ahora con mejor perspectiva de la fachada poniente hacia la Calle de Santa Isabel sorprende ver una esquina tan familiara toma que apenas y rebasa el siglo...



Luego de la inesperada muerte del señor Escandón el 20 de marzo 1876, los herederos hubieron de esperar algún tiempo para recibir su legado, ya que a los 62 años, don Vicente murió intestado. De los seis hijos (María Guadalupe n.1856, Alejandro n.1858, Manuel n. 1860, María Dolores n. 1862, María de la Luz n. 1866 y José Vicente n.1871) apenas tres habían sobrevivido y sabemos que la casa pasó a la propiedad de Manuel Escandón Arango 1860-1931, casado el 7 de octubre 1886 con Guadalupe Escandón Barrón, cosa que enlazaba dos de las más importantes líneas del tronco Escandón.



Hay una enorme confusión respecto a los miembros de la familia Escandón, ya que hubo trece descendientes con el apellido Escandón Garmendia y de ellos cinco hombres y tres mujeres continuaron la descendencia; en orden de edad aparecen entonces los Amor/Escandón, Arango/Escandón, Escandón/Ysunza, Escandón/Fagoaga, Escandón/Lamage, Escandón/Arango, Landa/Escandón y Escandón/Barrón. Ligadas con la casa de Plaza Guardiola, encontraremos únicamente a las ramas Escandón/Arango y Escandón/Barrón, familias que también resultan atadas al fraccionamiento de las Colonias Condesa y Escandón, con casas de campo en lo que hoy conocemos como el Parque Lira (ver) y la Embajada Rusa (ver), así como varios otros hitos urbanos de la Ciudad de México.



Para principio de siglo XX, la casa era parte de la zona urbana de mayor ajetreo en la ciudad y la planta baja estaba ocupada por varias dependencias ligadas con las actividades económicas de la familia, con locales que vendían boletos para ferrocarril y trasatlántico, divisiones en las nuevas colonias y lotes en el panteón de la Piedad; sabemos que hasta 1910, la planta alta de la casa siguió siendo residencia de doña Guadalupe Escandón y Barrón de Escandón. Abajo, en una fotografía de la Avenida Juárez durante los festejos del CENTENARIO –el 16 Septiembre de 1910--, aparece vista desde la Alameda la recientemente ampliada avenida San Juan de Letrán; a la izquierda puede verse la estructura del Teatro Nacional en construcción y al centro el edificio de “La Mutua” recientemente inaugurado; marcada en un óvalo rojo, la casa Escandón…



Por muchos años la casa sería parte de la esquina más fotografiada de la ciudad, especialmente por estar ligada a la casa de los Azulejos, que fungía como sede del Jockey Club, y acceso a la Plaza Mayor por Avenida Plateros, inicio del “Paseo dominical”; en 1906, el jardín frente a la casa recibió un “Monumento meteorológico”, obsequio de don Manuel Escandón a la ciudad. Abajo, en una fotografía fechada en 1907 aparece la Plaza Guardiola y a la izquierda, puede verse el mojón…



Nos dice Casasola que “..en el embellecimiento que hizo el ayuntamiento a la ciudad de México en el año de 1906, se instaló una estación meteorológica en la plaza de Guardiola, la que vino a llenar una necesidad pública, aparte de ser una obra de ornato”. El pabellón fabricado por las fonderies du Val d'Osne, de Haute-Marne –Francia—(misma compañía que ejecutó las “fontaines Wallace” que dotan de agua potable al viandante parisino y que fueron instaladas a partir de 1875), albergaba un barómetro que podía verse desde las caras norte y sur, así como dos termómetros montados en las caras oriente y poniente. Abajo, la fotografía de Casasola que al pié dice: monumento meteorológico instalado en la plaza de Guardiola.



Esa esquina sería también testigo de innumerables cambios en el desarrollo del transporte en la ciudad y por eso pongo un fragmento de mi fotografía favorita, tomada por Brehme en 1910, donde aparece un hombre cruzando San Juan de Letrán frente a Plateros; como fondo la casa Escandón, el Jockey Club y en la Plazuela de Guardiola el Monumento meteorológico y las nuevas luminarias..





Arriba, una imagen captada por 1931 desde la cúpula central del Teatro Nacional -que ya para entonces se remodelaba como “Palacio de Bellas Artes”, en que aparece señalada la casa Escandón -a la extrema derecha, se descubre parte de los andamios de la obra del edificio de la nacional de Seguros. Abajo, en una toma oblicua de la Compañía Mexicana de Aerofoto fechada en 1932, aparece en primer plano el Palacio de Bellas Artes durante las obras de terminación -a cargo del arquitecto Mariscal- y marcada en un óvalo rojo, la casa que entonces ya albergaba las primeras reuniones de lo que luego sería el “Club de Banqueros de México”. A la extrema derecha, puede verse el casi concluido edificio de la Nacional de Seguros, que en 1927 proyectara el arquitecto Manuel Ortiz Monasterio.



Luego de la Revolución, cuando ya la calle de plateros había sido bautizada como Francisco I. Madero y haber albergado la casa al Club de Banqueros de México, la propiedad pasó a manos de los herederos Escandón-Escandón y fue vendida al Banco de México en 1937; luego destruida en 1938 (así como las dos casas colindantes hacia el norte), a fin de albergar un nuevo edificio que permitiría al Banco (que ocupaba el edificio que había sido de la “Mutual Life Insurance” en la esquina de Cinco de Mayo y San Juan de Letrán y había sido ampliado y remodelado por el arquitecto Carlos Obregón Santacilia en 1925) incrementar el área de sus oficinas y tener una nueva bóveda con mayor capacidad. Abajo, una fotografía de “Excelsior” fechada en agosto de 1938, en que puede verse el proceso de demolición y más abajo, esa vista con más detalle...





Con fecha de “Agosto de 38” aparece abajo la casa Escandón, vista desde una de las terrazas del edificio de “La Nacional”, en pleno proceso de demolición; al centro –con muros perimetrales aún en pie– se distingue el patio que responde a los ejes del pórtico principal. Reproduzco la imagen gracias a la amabilidad de Javier Balbás, cuyo magnífico acervo es parte de la colección de don Francisco de Paula Diez Barroso Govantes.



Luego de desaparecer las edificaciones de esa manzana, se ventiló por algunas semanas en los periódicos la opinión de dejar el lote libre, con una plaza Guardiola más amplia que permitiera ver la Casa de los Azulejos; el director del Banco de México –Luís Montes de Oca- alegó que “Más de la mitad de la fachada de la casa, la que mira al poniente, es un remedo porfiriano de la construcción colonial…” y así se siguió con el proyecto. Abajo, en una fotografía de 1939, cuando se iniciaban las obras de cimentación para el “Anexo Guardiola” del Banco de México; aparece la Casa de los Azulejos (1737) a la derecha y la ampliación porfiriana (1909) a la izquierda.





Arriba, en una toma oblicua de la compañía Mexicana de Aerofoto fechada en 1939, aparece al centro el Palacio de Bellas Artes (inaugurado en 1934 luego de permanecer inconcluso desde 1912) y abajo la excavación para el nuevo edificio de oficinas para el Banco de México, que se conocería como el “Anexo Guardiola”, proyecto de Carlos Obregón Santacilia de 1937, con ingeniería de Federico Ramos. Abajo, en una imagen de 1941 firmada por Brehme, la confluencia de las avenidas Juárez, Madero y San Juan de Letrán con los tres nuevos edificios de estilo “Decó” que ahora la caracterizaban: Anexo Guardiola (Obregón 1937-39), Latinoamericana (1936) y La Nacional (Ortiz Monasterio 1928-37).





En el terreno que ocupó la Casa Escandón, frente a la Plazuela Guardiola, ahora se levanta el Edificio Guardiola, que fungió como bóveda para el Banco de México, oficinas en renta y albergó por varios años el Club de Banqueros de México en la parte alta. El edificio respetó la plaza Guardiola, pero desafortunadamente sufrió un asentamiento diferencial, por lo que al paso de los años ha emergido (con relación al hundimiento general de la ciudad) y ahora la plaza se encuentra en un desnivel que la hace poco atractiva.



En el edificio Torre Latinoamericana se ha montado un pequeño museo en el que se conserva una de las figuras de bronce que desde 1872 y hasta 1937 ornaron la Casa de la familia Escandón Arango…



Este Blog se ha hecho gracias al apoyo incondicional de Julieta Fierro; está dedicado a las “Grandes casas de México” y pretende rescatar fotografías e historia de algunas de las residencias que al paso del tiempo casi se han olvidado y de las que existe poca información publicada. El objeto es la divulgación, por lo que se han omitido citas y notas; si alguien desea mayor información, haga favor de contactarme e indicar el dato que requiere. Si utilizan las imágenes, favor de indicar la fuente –aunque advierto que pueden tener registro de autor–. Conforme haya más entradas (ya hay más de 50), aparecerán en el índice a la derecha de ésta página…



También se puede encontrar un índice general en: http://grandescasasdemexico.blogspot.mx/2016/02/indice-de-grandes-casas-de-mexico.html (Ver)















jueves, 14 de febrero de 2013

Casa O’Hea / Austin – Torre Reforma - MacStore.



La casa de Paseo de la Reforma N° 483, esquina con Río Elba, pasará a ser parte del conjunto de la nueva Torre Reforma, que dentro de pocos meses será el edificio más alto de la Ciudad de México…


Arriba, una de las imágenes que se hicieron públicas del proyecto “Torre Reforma” (presentadas por el despacho LBR Arquitectos y que construye Capital Vertical-Grupo Inmobiliario) se muestra además la casa que fuera residencia O’Hea/ Austin, Ramírez Arellano/Palafox y que en manos de don Ángel Isidoro Rodríguez “El Divino” fue remodelada por Pascal Arquitectos… Abajo, una imagen del estado que guardaba la casa a mediados de febrero de 2013.




Arriba, en un fragmento del plano de la ciudad de México para 1907, aparece el diseño de los terrenos frente al “Luna Park” con las nuevas calles de la zona “Reforma Norte” frente a Chapultepec limitada por la entonces Calzada Chapultepec-Tacuba… La casa de Paseo de la Reforma N° 483, esquina con la calle que ahora llamamos Río Elba, se construyó a partir de 1928 para el empresario Patrick A. O'Hea (de Stourbridge, Inglaterra) y su esposa Eileen Austin (de San Antonio, Tx.) en un peculiar estilo que recuerda la tradición inglesa del “Gothic Jacobethan Revival” favorecida por Sir Charles Barry (Highclere Castle, Hampshire), Anthony Salvin (Harlaxton Hall, Lincolnshire) y Basil Champneys (Rylands Library, Manchester).

Patrick Alfred O’Hea Harrison, nació en Stourbridge -Inglaterra- en 1883; aparentemente vino inicialmente a México por 1905 para asistir a don Pablo Martínez del Rio Castiglione, con quien había estudiado en Stonyhurst College. Al poco tiempo se encargó de la Hacienda Las Cruces -cercana a Torreón- y luego de la dirección de la Compañía Industrial Jabonera de La Laguna, S.A.
Para noviembre de 1920, contrajo matrimonio con Eilleen Austin en San Antonio -Texas- donde se dedicaba a la compra y venta de algodón en la “O’Hea Brothers” creada con su hermano. Por 1926, el matrimonio O’Hea Austin se trasladó a la capital de México siendo Mr. Patrick directivo de la Transcontinental Fruit Company y al poco tiempo decidió edificar una nueva residencia en el Paseo de la Reforma, frente al “Parque Luna”. Abajo, en una imagen de 1936, la casa de Reforma 483.


Edificada entre 1928 y 29 siguiendo un proyecto de los arquitectos Teodoro Kunhardt Urrea y Joaquín Capilla (tío del medallista olímpico), quienes también diseñaron el Frontón México, la casa se construyó en un terreno de la entonces Colonia Reforma-Chapultepec (hoy genéricamente Cuauhtémoc), que contaba treinta metros sobre la calle lindante al Paseo de la Reforma y superficie de poco más de 1300 m². Abajo, en una toma oblicua de la Compañía Mexicana de Aerofoto fechada en 1931 y que mira hacia el oriente, aparecen los terrenos de la Colonia Reforma-Chapultepec enmarcados por la Calzada Melchor Ocampo (hoy Circuito Interior) y el Paseo de la Reforma; al centro, se señala la casa O’Hea. Es interesante hacer notar que aunque aparece el trazo de la calle Río Lerma, aún no existe el rasgo de la calle Río Atoyac.



Arriba, en otra toma oblicua de 1931 y que ahora mira hacia el norte, aparece en primer plano la Secretaría de Salud (proyecto de Carlos Obregón Santacilia en la esquina que formaban la entonces Calzada de Tacubaya y Lieja al encontrarse con Paseo de la Reforma) frente a la que ahora se levanta la Estela de Luz, así como los terrenos de la Colonia Reforma-Chapultepec, donde se señala la casa O’Hea terminada apenas un par de años antes.

Con más detalle, en otra interesante fotografía oblicua de la Compañía Mexicana de Aerofoto, ahora fechada en 1930 y que mira la zona donde el Paseo de la Reforma llega a Chapultepec, se distingue la glorieta en que para 1942 se colocaría la “Flechadora del Norte”; la rotonda articulaba el Paseo de la Reforma con la Calzada de la Exposición, Avenida Lieja –que cortaba de tajo lo que había sido el “Luna Park” y en parte de cuyo terreno se había inaugurado el año anterior el edificio de la Secretaría de Salubridad– y la diagonal Chapultepec.


En la foto de arriba, sobre Reforma -donde también he marcado la casa O’Hea/Austin-, es interesante hacer énfasis en que aunque señaladas, aún no se han urbanizado las calles de Burdeos, Río Elba, Río de la Plata o Toledo, y sorprendentemente, ni Río Ródano o Río Atoyac, forman aún parte del diseño…

Como referencia, al extremo derecho de la imagen, toda la zona jardinada ahora es atravesada por el “Circuito interior Melchor Ocampo”, y al extremo izquierdo y abajo, se distingue la gran casa que pertenecía a la familia Braniff/ Cánovas/ Cornejo que en las fotos anteriores aparece como una densa arboleda.
A fin de entender el contexto residencial en que se edificó la casa, abajo aparece una residencia contemporánea, edificada en 1931 apenas a una calle de distancia (en la esquina de Reforma y Río de la Plata), con diseño de la mancuerna de Luís y Francisco Martínez Negrete –la estructura aún existe, aunque es irreconocible-.



La casa O’Hea con planta en forma de L, contaba 16 habitaciones en dos niveles distribuidos sobre el alineamiento del terreno y con fachadas forradas de cantera rosada de Querétaro; la ornamentación corresponde a los cánones establecidos por John Ruskin y Augustus Welby Northmore Pugin, que se volvieron enormemente populares a mediados del siglo XIX para el celebrado “Gothic Jacobethan Revival” y con los que el arquitecto Guillermo Teodoro Kunhardt Urrea estaba familiarizado. Además de los pináculos floridos, arcos apuntados y trilobulados, y las bóvedas nervadas al interior, la decoración incluye en ambas fachadas el broquel del Clan O’HEA que incorpora al escudo, un brazo que sostiene verticalmente una espada a la que se enrolla una serpiente y a los que se han añadido las tres coronas del escudo; se completa el ornato con la tradicional sentencia (en su variante galesa del Clan Hea, -sin la O’-),: SERVA JUGUM: “salvaguarda (conserva) el yugo”… (Agradezco al Sr. Patricio O'Hea la aclaración)



La casa contaba 6 grandes habitaciones, además de un “Hall” de múltiple altura, terraza, balcones, jardines y un edificio anexo con cuartos de servicio y garage; a pesar de haber sido edificada con muros de tabique, castillos armados y losas de concreto reforzado, al interior encontramos sillares aparentados, viguerías y bóvedas nervadas para continuar con la ilusión gotizante que Katzman describe como “Eclecticismo Exótico”.


Luego de la muerte de Eileen Austin, la casa fue vendida en 1933 y puesta a nombre de doña Virginia Ramírez Arellano (1892-1968), que desde 1944 la puso en renta y fue alquilada por la familia Méndez; finalmente en 1969 pasó a manos de la señora María del Refugio Palafox quien dejó la propiedad sin designación testamentaria, período a partir del cual la casa sufrió grave deterioro.



En 1993 la propiedad fue adquirida por Ángel Isidoro Rodríguez (banquero acusado en México de fraude y extraditado de España en 1998, y que en 2004 fue exonerado de todos los cargos) y entregada al despacho de Gerard y Carlos Pascal Wolf para ser transformada en un centro de reunión y restaurante que recibiría el nombre de “El Divino”.


Para 1994, Pascal Arquitectos develó un espacio refrescado y opulentamente guarnecido, con el diseño de un restaurante de tradición gastronómica catalana albergado en los salones del frente sur de la casa y un amplio sitio de reunión para unas 500 personas (que el propietario insistió en no llamar discotheque) en el ahora techado espacio que antes ocuparan jardín y servicios hacia el norte. Arriba, el gran “Hall” de la casa que entonces albergaba parte del restaurante; abajo parte de la nueva decoración y escalera, con motivos inspirados en los pabellones de la finca Güell de Gaudí...



La remodelación de Pascal Arquitectos agregó un acceso de cristal y metal sobre Reforma y rescató buena parte de los acabados interiores, recuperando la colorida decoración de viguerías, tallas y vitrales, aunque sustituyendo pisos de planta baja y modificando sustancialmente la distribución de la planta alta. Abajo, una fotografía del espacio interior entre el Hall y la terraza que mira a Reforma (Más imágenes de esa remodelación pueden encontrarse en http://www.pascalarquitectos.com/, sección “proyectos”, último ícono del área “Hospitalidad”).



Luego de varias peripecias, el local funcionó como un popular centro nocturno llamado “Living” y en Juio de 2008, se anunció oficialmente el proyecto encomendado al despacho LBR Arquitectos (Benjamín Romano) que incorporaba la edificación a la “Torre Reforma” que sería el edificio más alto de México; la casa “de estilo arquitectónico gótico ecléctico que combina en sus fachadas ventanas de arco árabe con formas semicirculares y rectangulares; por su antigüedad y diseño está catalogada por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) como Monumento Artístico (1982 – “Valor estético relevante”-) y no puede ser demolida ni modificada.” Es interesante recordar que por esas fechas se daba una intensa discusión en torno a la “Torre Bicentenario” que ocuparía el terreno de un inmueble moderno de enorme importancia (Pedregal 24, Súper Servicio Lomas, del arquitecto Vladimir Kaspé) y que terminó siendo desechada, parcialmente por la oposición a que se destruyera el inmueble. Abajo, en una maqueta de Martín H. Unzón una aproximación al proyecto, que muestra la relación entre la torre y la casa.



En 2008 se anunció que la torre contaría con área total de construcción de 76,082.63 m2, de los cuáles: 35,558.30 m² (42 niveles) se destinarían a área de oficinas; 4,376.84 m² a un club deportivo (5 niveles + 1 nivel de alberca + local comercial en sótano); 1,648.51 m² a la superficie de Lobby y Sky Lobby. Finalmente 658.68 m² corresponderían a la casa catalogada por el INBA que se encuentra en el predio. Además, se dio a conocer la peculiar estructura del nuevo edificio “en base a un libro abierto" como ellos lo llamaron: “dos caras rígidas en un ángulo de 90 grados en cuya unión se encontrará el núcleo de servicios. Desde estas dos caras -las cuáles serán las de colindancia- se colgarán las losas por medio de diagonales al exterior y tensores al interior, lo que hará que cada una de las plantas se encuentre libre de apoyos verticales”. Todo eso permitiría liberar el ángulo en que se encuentra la casa y edificar sobre ella sin tocarla…





Desde 2009 se iniciaron los trabajos en el terreno, aunque no fue sino hasta 2010 que se hicieron evidentes los trabajos en la edificación, ya por el cierre de la calle de Río Elba, ya por el muy publicitado movimiento de la casa; el 18 de abril de 2010, luego de haber montado la casa O’Hea sobre una charola y rigidizado su estructura, se trasladó hacia el fondo del terreno cerca de 18 metros, a fin de permitir la excavación y preparado de la nueva cimentación que albergaría los estacionamientos. Abajo, una fotografía del traslado, tomada el 8 de abril por la noche.


La casa permanecería en ese sitio por algunas semanas mientras se realizaban los trabajos de excavación y consolidación en la esquina sur-poniente del predio, período durante el que se tomó la fotografía que aparece abajo.



Lego de ser restituida a su posición original, se siguió trabajando, ahora tanto en la plataforma de cimentación como en los muros de soporte; aunque la obra parecía no avanzar, bajo tierra se excavaron los cimientos y prepararon lumbreras para rampas y ascensores.



Durante dos años, se siguieron produciendo modificaciones al diseño del edificio, aunque para 2012 ya se había avanzado enormemente en la excavación, con un sistema de muros zanjados (a la manera “Top/Down Method”) que ha permitido seguir excavando la cimentación, mientras se trabaja hacia arriba. En 2013 se ha iniciado el crecimiento exterior del edificio y los dos muros laterales se pueden ver ya rebasando la altura de los inmuebles colindantes.


Abajo, una toma de Google Maps hecha en 2011, en que puede observarse el sitio donde se encuentra la casa O'Hea.


Este Blog se ha hecho gracias al apoyo incondicional de Julieta Fierro; está dedicado a las “Grandes casas de México” y pretende rescatar fotografías e historia de algunas de las residencias que al paso del tiempo casi se han olvidado y de las que existe poca información publicada. El objeto es la divulgación, por lo que se han omitido citas y notas; si alguien desea mayor información, haga favor de contactarme e indicar el dato que requiere. Si utilizan las imágenes, favor de indicar la fuente –aunque advierto que pueden tener registro de autor–. Conforme haya más entradas (ya hay más de 50), aparecerán en el índice a la derecha de ésta página…

También se puede encontrar un índice general en: http://grandescasasdemexico.blogspot.mx/2016/02/indice-de-grandes-casas-de-mexico.html



Avance de la edificación luego del post inicial:

Para el 1° de Diciembre del 2013, el avance es evidente y permite entender el redultado final...



Para el 10 de Marzo de 2014, los entrepisos de la torre siguen apareciendo…



Para final de noviembre de 2014, la obra supera el piso 35 y comienza a aparecer la fachada de cristal.



En 2016 se anunció que la casa sería sede de una nueva “MacStore Reforma”; será interesante ver cómo se han reutilizado los espacios de “El Divino”…



Desde Septiembre de 2016, el edificio ha sido ocupado por varias oficinas y buena parte del exterior está completamente terminado, incluyendo la ilunimación nocturna...





Al exterior, la casa O'Hea ha quedado completamete restaurada y lista para el nuevo uso, programado para inaugurarse el 8 de diciembre de 2016.




El 4 de diciembre de2016, el edificio se utilizó como parte de una demostración equilibrista; Alexander Schulz cruzó Paseo de la Reforma sobre cuerda floja colocada entre los edificios de BBVA Bancomer y Torre Reforma…








Para enero de 2018, la casa parece haber vuelto a ser algo cotidiano...



Agregado el 01.11.18

Torre Reforma recibió el “International Highrise Award 2018”.